作词 : Steven Nehuen Pacheco
作曲 : Steven Nehuen Pacheco
(Verso 1)
En la fragua ardiente, donde el metal se funde, Ferrus Manus trabaja, su alma imperturbable. Forjando espadas de leyenda, armaduras indestructibles, Sus manos de hierro crean maravillas inquebrantables.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Verso 2)
En la batalla, lideras con estrategia implacable, Los Manos de Hierro siguen tu estandarte inquebrantable. Tu voz ruge como un trueno, inspirando a tus hermanos, Porque en tu corazón late la lealtad y el deseo de ser humanos.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Puente)
Pero la tragedia acecha, en la oscuridad del abismo, Fulgrim, tu hermano, traiciona con un beso maldito. La espada demoníaca cae, tu cabeza se separa, Y en ese momento, el Imperio llora tu partida sincera.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Coda)
Así cantamos tu nombre, en los salones de la historia, Ferrus Manus, el inmortal, en nuestra memoria. Que tus manos sigan forjando estrellas en el cielo, Y que tu espíritu guíe a los guerreros en su anhelo.
(Verso 3)
En la oscuridad del abismo, Ferrus se alza de nuevo, Su cabeza yace en el polvo, pero su espíritu no está muerto. Las estrellas lloran lágrimas de acero, su legado resplandece, La venganza arde en su corazón, como un sol que no envejece.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Verso 4)
Los Manos de Hierro se reúnen, sus corazones en llamas, Jurando lealtad a su primarca, en un mundo sin reclamos. Las espadas se alzan, las armaduras relucen, Ferrus lidera la carga, su voz como un trueno.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Puente)
Fulgrim, el traidor, tiembla en su trono dorado, La espada demoníaca teme al acero forjado. Ferrus sonríe, su risa retumba en los cielos, “La muerte no me detuvo, hermano, solo me hizo más fuerte”.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Coda)
Así cantamos tu nombre, en las estrellas y el viento, Ferrus Manus, el inmortal, el guerrero sin lamento. Que tu leyenda perdure, como un sol en el horizonte, Porque en cada martillazo, tu espíritu se hace más fuerte.
作词 : Steven Nehuen Pacheco
作曲 : Steven Nehuen Pacheco
(Verso 1)
En la fragua ardiente, donde el metal se funde, Ferrus Manus trabaja, su alma imperturbable. Forjando espadas de leyenda, armaduras indestructibles, Sus manos de hierro crean maravillas inquebrantables.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Verso 2)
En la batalla, lideras con estrategia implacable, Los Manos de Hierro siguen tu estandarte inquebrantable. Tu voz ruge como un trueno, inspirando a tus hermanos, Porque en tu corazón late la lealtad y el deseo de ser humanos.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Puente)
Pero la tragedia acecha, en la oscuridad del abismo, Fulgrim, tu hermano, traiciona con un beso maldito. La espada demoníaca cae, tu cabeza se separa, Y en ese momento, el Imperio llora tu partida sincera.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, maestro herrero, de corazón de acero! Tu legado se forja en cada martillazo certero. Con necro dermis en tus venas, y una mirada furiosa, Eres la Gorgona, el artífice de los despojos.
(Coda)
Así cantamos tu nombre, en los salones de la historia, Ferrus Manus, el inmortal, en nuestra memoria. Que tus manos sigan forjando estrellas en el cielo, Y que tu espíritu guíe a los guerreros en su anhelo.
(Verso 3)
En la oscuridad del abismo, Ferrus se alza de nuevo, Su cabeza yace en el polvo, pero su espíritu no está muerto. Las estrellas lloran lágrimas de acero, su legado resplandece, La venganza arde en su corazón, como un sol que no envejece.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Verso 4)
Los Manos de Hierro se reúnen, sus corazones en llamas, Jurando lealtad a su primarca, en un mundo sin reclamos. Las espadas se alzan, las armaduras relucen, Ferrus lidera la carga, su voz como un trueno.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Puente)
Fulgrim, el traidor, tiembla en su trono dorado, La espada demoníaca teme al acero forjado. Ferrus sonríe, su risa retumba en los cielos, “La muerte no me detuvo, hermano, solo me hizo más fuerte”.
(Estribillo)
¡Oh, Ferrus, renacido de la forja ardiente! Tu alma inmortal desafía al destino persistente. Con la necro dermis como coraza, y el fuego de la forja en tu mirar, Eres la Gorgona, el martillo que aplasta los despojos.
(Coda)
Así cantamos tu nombre, en las estrellas y el viento, Ferrus Manus, el inmortal, el guerrero sin lamento. Que tu leyenda perdure, como un sol en el horizonte, Porque en cada martillazo, tu espíritu se hace más fuerte.